En un inconmensurable fuera de cuadro de un conflicto de cincuenta años, con puntadas de la vida íntima y familiar de la autora, triangulando con el Club campestre en donde se construyeron muchos de sus recuerdos, reconoce el hilo profundo con el que se asume la proveniencia del útero y las probables consecuencias de interrumpir el exilio de la guerra. 

Toda esta historia, atravesada por una narrativa personal con memorias que se hermanan de silencios necesarios entre imágenes tranquilas en las que el futuro parece seguir augurando continuidad, nos preguntamos, el lobo y la loba que nos habita ¿qué tendría por contar de su presunta responsabilidad?

Un excelso retrato personal y un homenaje más que merecido a la doctora honoris causa en Ciencias Sociales María Teresa Uribe por su contribución no solo a pensar escenarios de concertación en el país para superar el conflicto, sino como partícipe y protagonista de un tramo de la historia, cuyo desenlace de cuento feliz, pareciera seguir en suspenso. Leidy Patiño.